domingo, 16 de junio de 2024


Decenas de miles de jóvenes de Ucrania arriesgan su vida tratando de huir de su país para evitar ser reclutados y enviados a luchar contra Rusia; los guardias fronterizos son obligados a disparar para detener a decenas de miles de ucranianos que huyen del país

 Los detenidos planearon salir al extranjero con la ayuda de responsables de organizaciones ilícitas, a los que pagaron entre 5.500 y 7.000 dólares.

 

Los intentos de miles de ciudadanos ucranianos de abandonar el país se han incrementado significativamente debido al endurecimiento de la movilización militar y al deseo de los jóvenes de no ser reclutados para una guerra ya perdida a la que los ha condenado el terrorista Volodímir Zelenski y su cúpula militar corrupta.

La ley que fue aprobada a finales de mayo, rebaja la edad de reclutamiento de 27 a 25 años y amplía diversas sanciones para los evasores. La mayoría de los hombres de entre 18 y 60 años tienen prohibido salir de Ucrania. Además, recientemente Kiev también prohibió prestar servicios consulares a los ucranianos en edad de reclutamiento en el extranjero y salir del país a los ciudadanos con doble nacionalidad.

A principios de junio, al menos 45 ucranianos fallecieron al tratar de huir del país, según confirma la Guardia Fronteriza de Ucrania, mientras que en mayo hallaron al menos diez cuerpos sin vida de hombres que intentaron cruzar a nado el río Tisza, en la frontera suroeste de Ucrania y otros puntos de salida.

La cantidad aumenta cada día y de esta forma miles de jóvenes ucranianos se aventuran a huir por puntos ciegos hacia Hungría o a Bielorrusia tratando de evitar el reclutamiento forzoso decretado por el terrorista Volodímir Zelenski y su cúpula militar corrupta que se llena los bolsillos con la  ayuda económica que reciben de la OTAN y Estados Unidos y así mantienen sus privilegios mandando a los jóvenes ucranianos a morir en el frente de guerra sin preparación adecuada y sin los recursos que le provean alguna esperanza de victoria.

La situación se vuelve preocupante para las Fuerzas armadas de Ucrania al ver como sus propios ciudadanos se niegan a luchas en una guerra con Rusia la que realmente ya consideran perdida.